sábado, 22 de febrero de 2014

El mundo al revés, niñas que se embarazan para dejar de estudiar


http://blogs.elpais.com/escool/2014/02/el-mundo-al-revés-niñas-que-se-quedan-embarazadas-para-dejar-de-estudiar.html

La educación tiene el poder de dar o quitar mucho más que conocimientos a los niños. El saber les da seguridad en ellos mismos y motivación para aspirar a un futuro mejor. Una educación deficiente hace que, a veces, se vuelve el mundo del revés. Es lo primero que se piensa cuando se conocen, por ejemplo, las causas de muchos embarazos tempranos. Un informe cuantitativo y cualitativo realizado en América Latina y el Caribe por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) revela, por un lado, que la tasa de fecundidad entre chicas es en esta región mucho más elevada que el promedio mundial (se producen 80 nacimientos por cada mil adolescentes en Latinoamérica frente a 55 de media en el mundo) y, por otro, que “en muchas ocasiones el embarazo es una vía de escape para las adolescentes que consideran que la educación no va a alterar su futuro, así que quedarse en estado para no ir a la escuela tiene gran sentido para ellas”, señala el informe.  Esta región es la única que ha sufrido un aumento de la fecundidad adolescente en los últimos 30 años. Se calcula que las madres adolescentes darán a luz en esta década a más de 20 millones de niños.


"Tomé precauciones durante el primer mes. Después dejé de hacerlo. Tenía esa idea loca de que debía tener un bebé”, dice una las madres entrevistadas para el estudio, que dio a luz a los 16 años.
El embarazo es para muchas adolescentes una salida a su insatisfacción. Son jóvenes de familias desfavorecidas socioeconómicamente. Y no ven que la educación pueda alterar su futuro. Se quedan embarazas aposta porque se sienten solas y porque la escuela no les ofrece mucho, lo que les hace perder el interés por aprenderPiensan que teniendo un niño y dejando el colegio se convertirán en adultas, dejarán de estar solas, encontrando estabilidad en su familia, se sentirán valoradas en su entorno y darán un sentido a su vida. Las madres adolescentes estudian entre dos y cuatro años menos que el resto de las chicas. Entre el 70% y el 90% de las adolescentes (entre 15 y 19 años) que tienen un niño de adolescentes abandonan la escuela en América Latina. Sin embargo, entre las que no son madres a esas edades el abandono temprano se sitúa entre el 14% y el 35%.
Muchas de las madres adolescentes que entrevista este estudio “decidieron no usar métodos anticonceptivos, a pesar de conocerlos, para quedarse embarazadas y dar por fin un sentido a sus vidas”, explica el informe. Además, son chicas quemayoritariamente ya tenían malos resultados académicos antes de quedarse embarazadas y esa fue una de las razones por las que no consideraron seguir estudiando. Pero las pocas madres jóvenes con buenos resultados académicos sí concluyeron la educación secundaria.
"No malquiero a mi hijita, pero hubiera preferido no quedar embarazada tan temprano; habría preferido esperar un poco más”, se lamenta otra madre adolescente.
En conclusión, las políticas educativas no pueden limitarse a informar sobre cómo no quedarse embarazada y a dar acceso a los anticonceptivos. En las capas sociales más desfavorecidas, con esto no es suficiente. En Latinoamérica y seguramente en muchas otras partes de mundo. Las adolescentes necesitan ayuda bien a través de programas de asesoramiento que les ayuden a mejorar su autoestima y a construir una identidad clara y positiva bien de apoyo escolar de profesionales que, por un lado, fomenten su interés por el aprendizaje y por la repercusión positiva que puede tener en sus vidas  a medio plazo y, por otro lado, que las ayuden a mejorar su rendimiento y las motiven para no abandonar los estudios.
Muchas entrevistas en este estudio lo dicen claro: si alguien les hubiera ayudado, no se hubieran quedado embarazadas tan pronto para dejar la escuela. Y solo las políticas educativas, bien encaminadas, bien dotadas económicamente y pegadas de verdad a las necesidades de la sociedad tienen el poder de evitar estas situaciones. De evitar un mundo al revés.

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Interesantísima nos ha parecido esta noticia del periódico El País, que sin duda nos lleva a una reflexión a cerca de la educación; pero no nos referimos a la educación en sí  de las niñas -eso se da por supuesto y la autora lo deja muy claro-, nos referimos a la educación del profesorado.
Desde hace un tiempo en la Asociación Inspiración Femenina Tian trabajamos en el proyecto que hemos llamado Femninología, una manera de abordar la "salud en femenino". La mujer enferma por una causas diferentes a las del varón, debido a las condiciones históricas y sociales que le ha tocado vivir; por ello, el diagnóstico y enfoque de un tratamiento es distinto. Este enfoque, sin duda, creemos que puede mejorar enormemente las posibilidades de una mejora de salud en la mujer.
Del mismo modo, creemos que la educación debe tener un "enfoque de género". 
Habría que empezar por las madres y el entorno familiar. Las madres son las primeras en creer que hoy en día  es lo mismo tener un niño que una niña; ¡eso no es igual ni en los países desarrollados! 
Y, por supuesto, que esta educación debería ser de especial relevancia en el profesorado. ¡Sí! Educar a los educadores. No es igual tener en el aula a chicos que a chicas. Conocer muy bien los problemas del entorno de esos jóvenes, saber la lacra ideológica que sobre ellos pesa, sería la primera asignatura a ofrecerles para que los alumnos alcancen una identidad al margen de los estereotipos sociales que sobre ellos gravitan.

En otro aspecto, la noticia nos hace referencia a adolescentes de países de Latinoamérica. ¿Pero pensamos que nuestras adolescentes están muy lejos de esto? La situación no es tan dramática en cuanto a maternidad se refiere, por una cuestión muy clara y es que las adolescentes europeas tienen anticonceptivos a su alcance. No obstante, buscan otras "triquiñuelas".El interés por los estudios de una adolescente "media", de clase "media" europea, es muy mediocre, en general. Las excepciones siempre existen. Tienen la cabeza llena de ropa de firmas y entre "mangos" y "a-zaradas", transcurre su competencia por ser aún la más guapa, la más atractiva. Lamentablemente el espacio de sus cabezas no está lleno de buena literatura si no de libros de príncipes encantados, aunque un poco "vampirescos" sean. 
Aún se sigue viendo en el "chico" y en la "boda" la opción de liberarse de una formación porque parece que ésta nos hiciera menos atractivas o nos hiciera perder tiempo; un reloj de arena la sociedad pone en marcha  desde que nacemos y  nos avisa cruelmente a su debido tiempo de que "se nos está pasando el arroz".
Desde este grupo venimos insistiendo desde sus orígenes y  hasta la saciedad que la educación y formación de las niñas es la única vía para que dejen de ser meras hembras reproductoras. 
Si, a pesar de una buena formación profesional y cultural, vemos en  médicas, arquitectas, ingenieras, abogadas, economistas, traductoras,  víctimas emocionales por el hecho de ser mujer, podemos imaginar ¡cuánto -en materia de cultura- nos queda por recorrer a las mujeres! Una cultura que no nos haga eruditas si no que nos de una perspectiva de nosotras mismas como seres inteligentes- emocionalmente hablando- capaces de proyectarse en un futuro sin las lacras sociales que han hecho de nosotras muñequitas de escaparte; eso sí ¡siempre en rebajas!

Publicado por Inspiración Femenina Tian.



1 comentario:

  1. La educación los niños la ven como obligación porque eso les han hecho sentir! Nuestros padres nos obligan a estudiar carreras que no deseamos,y hacen de la educación. Algo tedioso y sin un sentido para ellas,en mi opinión creo que en general hace falta motivación, deberíamos poner en práctica técnicas nuevas desde muy temprano para que nuestras niñas deseen ser y estudiar lo que ellas quieran así se equivoquen al escoger mal no les va hacer todo lo contrario y no lo que los demás desean que sean

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